jueves, 26 de agosto de 2021

chafardero 146

 <<EL NUEVO CHAFARDERO INDOMABLE

NÚMERO 146    ANNO VII>>




PRIMERA PLANA

Perteneció a ese tipo de personas que no quieren pertenecer a ningún grupo como el sagaz Groucho; aunque era más de Monty Phyton, Jacques Tati, Jardiel o el Barón de Münchhausen.

Lúcido y despierto, despotricaba de la realidad y sus congéneres; tal vez por eso (o por su amor confeso por la ciencia ficción y los juegos de estrategia) se inventó otra en la que se sentía más a gusto, hecha a su imagen y semejanza en la que todos seríamos más felices. También pudo ayudar el hecho de vivir solo desde muy temprana edad. En principio, inventarse mundos paralelos más satisfactorios demuestra imaginación, pero tiene un problema básico, a nuestro humilde entender: siempre chocarán con el azar y... la terca realidad.

Muchos han sido los buenos momentos compartidos en casi cuarenta años de amistad; el concierto de los Floyd en el extinto Manzanares,  el de Peter Gabriel en el incinerado Palacio de los Deportes,  la actuación de Música Inculta del gran Quique Merchán en el mítico Rock Ola, las divertidísimas funciones de Les Luthiers en el Alcalá Palace, frente a cuya taquilla se instalaba en una silla de playa, armado de tabaco, cervezas y música, para conseguir alguna de las escasísimas entradas que ponían a la venta, por ejemplo; aunque hubo muchos más... como las ancas de rana que compartimos una madrugada en un mesón de Triana, nuestra sorpresa por la gran portada del convento de Monjas Mínimas del mismo barrio, el besucón recibimiento que nos dispensó la Anselma en su local (luego descubrimos que era el habitual con todos los nuevos clientes), las copas de Agua de Sevilla en la calle Betis o  de Sangre de Cristo en el pintoresco Garlochí cerca de la plaza de la Alfalfa, el descenso en barco por el Guadalquivir hasta Sanlúcar, la noche filosófica en el apartamento de Antonio Pinillo aderezada con exquisitos quesos franceses y varias botellas de Châteauneuf-du-Pape (¡qué bien se han cuidado siempre estos santos varones!), la excursión de varios días por Ávila y Salamanca junto a su encantadora y paciente novia Magdalena, las visitas místico-etílicas a Segovia, las innumerables cañas en todos los bares existentes entre Cascorro y Malasaña (para aumentar nuestra cultura), pasando por algunos locales entrañables como Corripio, el Ñeru y el del vermú de la plaza de Chueca o las noches de champán en la terraza de su edificio cantando temas de los Doors a grito pelado para satisfacción de sus vecinos.

Por contra, también hubo diferencias, acrecentadas al desaparecer la sorpresa por conocernos demasiado bien: como aquella mítica jornada de mudanza, que duró todo un día y aún no he logrado olvidar treinta y tantos años después,  que terminó con una nevera metida en el ascensor de su bloque y todos sus queridos vecinos -ancianos en su mayoría- protestando, porque no podían utilizar el susodicho; aunque se hubieran reunido todos en el portal (¡Cómo lo consiguieron sin el elevador es una hazaña que sigo sin explicarme!), donde había regresado el ascensor desde su piso al no poder sacar la nevera, porque las puertas se abrían hacia dentro,  o aquel otro día en que se empeñó en explicarle a un bombero, que había perdido a varios compañeros en el reciente  incendio de los almacenes Arias, el color del pendón de Castilla a pesar de la creciente animadversión del susodicho. Sólo llevándomelo del bar evité que terminase mal, pues otra de las características, o consecuencias, de vivir en su mundo era que no escuchaba a los demás, por lo que no se enteraba -en el fondo, no le interesaba- de lo que sucedía a su alrededor, pues el plan que había organizado siempre era mejor que cualquier otra posibilidad. 

Casi cuarenta años de amistad abarcan muchas vicisitudes, pero quiero terminar este somero panegírico con el día en que el señor Enrique García Segovia, recientemente fallecido por una traidora enfermedad pulmonar que tal vez subestimó a pesar de las advertencias, ganó un concurso de relatos con  un cuento magnífico sobre la conquista de América por las pulgas que viajaban en las carabelas colombinas. Lo celebramos comiendo en casa del amigo Andrés unos sabrosos chuletones de buey -materia en la que era muy exigente, pues, según su parecer, en pocos sitios había buena carne-, regados con una botella de Burdeos o Borgoña (no recuerdo bien), otra de Marqués de Murrieta, otra de.... hasta que llegó un momento en que perdimos la cuenta. Enriquito era muy generoso, pero sólo con aquellas personas que consideraba dignas de ella (como casi todos). Otro ejemplo de su buen gusto era la sincera adoración que sentía por los tafanarios femeninos (como toda persona de bien).

La vida será más dura sin él. Sus amigos nunca superaremos el vacío que ha dejado en nuestros corazones el muy mamón.



¿QUÉ SUCEDIÓ EN ESTOS DÍAS?

- Polonia prepara una ley que impedirá a los judíos reclamar sus tierras robadas durante el nazismo.

- Euskadi paga 63 pensiones vitalicias a dos exlehendakaris y otros altos cargos autonómicos.

- Vox de CLM consigue que se censure el cartel de una actuación musical por "ofensa extrema a la Virgen" (aunque no aclaró  a cuál se refería).

- Una manifestación intenta tomar las instalaciones de la BBC en Londres, pero se equivoca de edificio.

- Alquila una habitación de su vivienda con la condición de no usar mascarilla.

- Un bar de Marbella vende gel antirrojos.

- El gobierno de Aragón plantea que los pájaros aprendan a esquivar los aerogeneradores.

- El ayuntamiento de Gijón no prorrogará la concesión de la plaza de toros a la empresa que la regenta actualmente, por lo que no habrá más espectáculos taurinos de momento. La razón ha sido el nombre de de dos astados -"Feminista" y "Nigeriano", de la ganadería albaceteña de Daniel Ruiza-. Para más inri, el responsable de lidiarlos fue el diestro Morante de la Pueble, conocido como "el torero de Vox". Luego dirán que este país no es divertido.

- Se dispara el precio del burka en Afganistán tras la llegada de los talibanes.

- Un nuevo dinosaurio hallado en Burgos se llamará Andrés Iniesta.

- El alcalde de Chipiona (del partido Unidos por Chipiona) encarga un estudio para comprobar si el Guadalquivir desemboca en esta localidad en vez de en Sanlúcar de Barrameda (le encantaría a Enriquito).





OLDIES  

Según la wikipedia, "el dixieland es un estilo de hot jazz en el que predominan la imaginación y el metal que se desarrolló durante la década de 1910. El origen del nombre proviene del número francés "dix", diez; ya que los billetes existentes entre las Rocosas y el Mississippi, región donde se originó este ritmo, pertenecía a Francia.

El primer intérprete reconocido fue "Papá" Jack Laine, al que siguieron el cornetista Nick La Rocca y su banda, Anton Lada y sus "Luisiana Five" (que serían cuatro), el trompetista Edward "Kid" Ory, etc. En años posteriores disfrutó un renacer  con intérpretes como  Bix Beiderbecke, Eddie Condon o Bobby Hackettt y, más actualmente, con los compatriotas de la Canal Street Band, existente desde 1967.

Hot cooking: https://www.youtube.com/watch?v=X2h02fvWid4

Tiger rag (Canal street Band) : https://www.youtube.com/watch?v=9hQl4DgCI0Y




LITERALIA



LA NOCHE SE HIZO DÍA





Yo entré en Bagdad junto a Al-Ma’mun, el califa poeta, seis años después de su destrucción por las 

tropas que mandaba su comandante en jefe, el turco Tahir.

Humilde herrero, me alisté en su ejército para garantizarme una paga con la que mantener a mi esposa rumí y a mis tres hijos. Seguí al príncipe por todo el imperio abasí desde que su padre, el famoso Harum Al-Rasid, harto de cuentos, le entregó el Este de sus vastos dominios y antes de que batallara con su hermanastro ‘Amin por el control de todo el territorio.

Ciegos de ambición y faltos de carácter, los dos hijos del sangriento Harum se dejaron influir por sus respectivos favoritos, el convertido Fade ben Rahí y el jurasamí Fadl ben Sahl, y se lanzaron a una guerra fratricida que terminó devastando los dominios de su padre.

Tras recibir el Oeste del reino, y por ser hijo de una esposa legítima del califa, ‘Amin pretendió imponer sus derechos sucesorios a su hermanastro Al-Ma’mun; primogénito, pero vástago de una esclava persa llamada Irán. Cuando la conflagración resultó inevitable, mi señor llamó en su apoyo a los jurasamíes, pueblo originario del mar Caspio famoso en todo el Asia Menor como arqueros y artilleros. Corría el año 809, según las cuentas de mi mujer.

De forma paulatina, tras los primeros escarceos para comparar las fuerzas de ambos contendientes, el conflicto se fue decantando hacia nuestro bando. No existían murallas lo bastante sólidas como para resistir el continuo bombardeo de nuestras máquinas de guerra llamadas al-manyaniq o almajaneques en cristiano. Consumada la rendición sin condiciones de las ciudades sitiadas, el turco Tahir mandaba pasar a cuchillo a todos los habitantes varones mayores de cinco años. Los prisioneros necesitan alimentos y vigilancia continua y no podíamos desperdiciar ni hombres ni vituallas. Solas y sin recursos, las mujeres preferían unirse a nosotros y, poco tiempo después, a los soldados que mejor las trataban; por lo que arrastrábamos una gran multitud civil que marchaba en la retaguardia de nuestro ejército.

Obligado a una huida constante por nuestras abrumadoras victorias, casi sin apoyos externos ni medios propios, el príncipe ‘Amin terminó refugiándose con sus seguidores en mi muy querida Madinat al-Salam, fundada a orillas del río Tigris cien años después de la Héjira por Al-Mansur con el nombre de Bagdad. Lentos pero inexorables, proseguíamos nuestro avance triunfal hacia ella, dejando tras nosotros una estela de cadáveres y aldeas devastadas; lo que trajo como consecuencia un aumento del número de mujeres y niños en nuestro grupo. Este fenómeno y cierta relajación por parte de nuestros jefes, permitieron al príncipe ‘Amin disponer de tiempo suficiente para arengar a los habitantes de la ciudad, leales a la memoria de su padre, y convocarles a la yihad o Guerra Santa contra “el traidor Al-Ma’mum, que pretende usurpar mis legítimos derechos al trono”, concluyó entre el griterío de sus seguidores. Los más receptivos fueron los vecinos de barrio Harbbiyyah, que juraron luchar hasta la muerte contra mi señor y sus turcos renegados.

Mientras avanzábamos hacia la capital del país, entablé relación con Zuleima, joven viuda de un artillero muerto en combate, famosa en el campamento por sus hermosos ojos azul zafiro. Como siempre he sido honesto en mi trato con las mujeres, le confesé que tenía mujer y tres hijos residentes en mi aldea natal; por lo que no representaban un obstáculo para amarla como si fuese la única. Madre de un niño de corta edad, sola y desamparada, no tardó en aceptar mi propuesta y en recibirme en la escueta intimidad de su carromato.

Una mañana se presentó en mi fragua el mismísimo Tahir trayendo de la brida a dos hermosos animales que reconocí al instante: el alazán respondía al nombre de “Tenebroso” y era su caballo favorito; el blanco se llamaba “Viento de Alá” y pertenecía a mi príncipe. El turco me ordenó que revisara sus herraduras y que, cuando terminase con ellos, siguiese con los de su Estado Mayor, pues les esperaban duros combates “cuando la Luna vuelva a tener cuernos”, según propias palabras. Abrumado por el trabajo que representaba su mandato, intenté hacerle comprender que era tarea excesiva para un hombre solo; pero se limitó a contestarme que no admitiría retrasos so pena de muerte. Al mediodía, regresó junto a dos hermanos: Alí y Zoraida, hijos de un desertor que habían ejecutado al amanecer y me los entregó para que me ayudaran en la faena. El muchacho, vigoroso y dispuesto, resultó idóneo para el duro trabajo de la fragua; mientras su hermana, más delicada, ayudó a mi esposa en las tareas domésticas. Les hicimos un sitio en la tienda y, durante el tiempo que tardé en revisar todos los caballos, conformamos una familia ideal. El encanto se rompió, cuando Zuleima quedó embarazada y centró todos sus celos en la grácil Zoraida. Resolví tan desagradable situación, convirtiéndola en mi tercera esposa.

Dos años después, mayor de edad y con el cuerpo moldeado por el trabajo diario, Alí se presentó ante Tahir y le pidió que le aceptara en su cuerpo de élite. El turco le examinó detenidamente y comprobó la solidez de sus músculos. Sin pronunciar palabra, le entregó a su lugarteniente Okal para que le convirtiera en un soldado invencible. “Si perseveras, Alá te premiará con sus favores”, señaló el comandante. “Yo te digo que serás uno de los elegidos que iluminará la noche de Bagdad”, añadió finalmente.

Desde entonces, le vimos muy poco; pues siempre estaba practicando con el arco, o peleando a espada, o aprendiendo a preparar las mish’al, unas bombas incendiarias elaboradas a base de la nafta, petróleo según los bizantinos, que extraían de pozos tan antiguos y ricos como los de Dir al-Qayyara, cerca de Mosul; aunque pude seguir sus progresos gracias a los comentarios que hacían sus compañeros de armas, cuando traían sus monturas a la herrería.

Meses después, se presentó el turco Tahir acompañado de un hombre vestido de negro riguroso, salvo la brillante coraza de cuero rojo que protegía su torso. A una orden suya, se quitó el velo que cubría su rostro y, entonces, reconocí a Alí, que se había convertido en el mejor soldado de nuestro ejército; por lo que nuestro príncipe decidió nombrarle jefe de su guardia personal. Venía a despedirse de su hermana; pues, a causa de su nuevo cargo, debía permanecer en los aposentos privados de Al-Ma’mum. Tras abrazarnos estrechamente, ambos hombres subieron a sus monturas, picaron espuelas y se unieron al grueso de nuestro ejército. Alí pertenecía por méritos propios a la temida caballería abasida y su nombre pasaría a la historia como organizados de las tropas de la nafta.

Entretanto, mi familia había aumentado con el nacimiento de Fátima, segundo vástago de Zuleima, que había heredado sus impresionantes ojos azul zafiro, y el niño de Zoraida, al que llamamos Alí ben Yusuf, en homenaje a su tío.

En primavera, llegamos ante las puertas de Bagdad, la muy santa y amada Madinat al-Salam. El turco Tahir desplegó un gran pendón blanco y cabalgó hasta el pie de las murallas; donde parlamentó con el jefe de la guardia. Exigió la inmediata entrega del traidor ‘Amin a cambio de no destruir la ciudad y respetar la vida de sus habitantes; pero el oficial rechazó su propuesta y se preparó para defender la ciudad de nuestros ataques. Tahir picó espuelas, llegó hasta nuestras filas y mandó desplegar cientos de almajaneques alrededor de todo el recinto amurallado. Después, ordenó que las cargaran con bombas de arcilla repletas de nafta encendida y que las arrojasen sin descanso hasta el atardecer.

Al llegar la noche, las catapultas cesaron sus lanzamientos y nuestro ejército se retiró a su campamento para descansar; mientras los habitantes de Bagdad sofocaban los numerosos incendios que se habían originado en sus casas de adobe, reparaban sus defensas, atendían a sus heridos y enterraban a sus muertos. Esta tónica, que se mantuvo durante toda una semana, era completada con mortíferas incursiones de nuestra caballería en las líneas defensivas de los sitiados. Al-Ma’mum confiaba en que su hermano entrase en razón y derogase la ley que le arrinconaba en la línea sucesoria para volver a cazar juntos por las vastas praderas de su imperio; aunque ordenó a su comandante que siguiesen los bombardeos.

El atardecer del décimo día, como los anteriores, sonó un gran cuerno y los almajaneques suspendieron sus letales disparos. De nuevo, los habitantes de Bagdad volvieron a aprovechar la ocasión para apagar los incendios y sepultar a sus numerosas víctimas. Entonces, un arquero se destacó del resto de nuestro ejército, se irguió desafiante sobre un alcor, tensó su arco y disparó un dardo flamígero que cruzó el firmamento entre la algarabía de nuestros soldados y el recelo de nuestros enemigos. Cayó en la tienda de ‘Amin, que comenzó a arder al instante. El saetero resultó ser mi buen Alí; quien llegaría a ser, años más tarde, el principal impulsor de los legendarios naffatum, los arqueros de la nafta, que aterrorizarían a los moradores de las ciudades sitiadas por las tropas abasíes con sus espectaculares ataques nocturnos. A su flecha, siguieron miles y miles que iluminaron el cielo estrellado. La noche se hizo día. Con el amanecer, las catapultas sucedieron a los arqueros y completaron los devastadores efectos de sus disparos.

A media mañana, se abrió la puerta principal de la ciudad y, chamuscado y vencido, el príncipe ‘Amin salió de Bagdad y se presentó ante su hermano, al que rindió la espada. Influido por el turco Tahir, le condenó a muerte; sentencia que ejecutó el verdugo cortándole la cabeza con un inmenso alfanje. Los defensores de la ciudad corrieron su misma suerte y las mujeres fueron entregadas a nuestros soldados, que se habían lanzado a la más furibunda rapiña. A mí me correspondieron Habiliyya, que resultó ser una excelente cocinera, motivo por el que le convertí en mi cuarta esposa, y un quinto piso en el citado barrio de Habiyyah, una vez finalizada la reconstrucción de la ciudad. Corría el año 813, según Teodora, mi esposa rumí.

Entretanto, licenciado y dueño de una pequeña fortuna proveniente del suculento botín de guerra, me instalé con mis esposas e hijos en un oasis cercano a la antigua Ctesifón; donde regenté una posada hasta que, seis años después, pude entrar en Bagdad, la muy santa Madinat al-Salam, junto a mi señor Al-Ma’mum.




¿QUÉ SUCEDIÓ EN ESTOS DÍAS?

- La raza canina turnspit, conocida como perro cocinero o pequeño labrador, fue creada en Inglaterra para desarrollar trabajos domésticos desde la Edad Media hasta su extinción en 1860. Integrados en la categoría de pinche o ayudante de cocina por su eficaz labor en el manejo de los espetones. caminaban encerrados dentro de un tambor, como los cobayas, para mover los hierros que soportaban los grandes asados de carne.. También realizaron funciones de perro de compañía o... faldero.



- La Pepsi Cola es un invento del farmacéutico usamericano Caleb Bradham, quien, en 1983, desarrolló su fórmula a base de "extracto de nuez de cola, vainilla y aceites raros". Su nombre deriva de la nuez de cola y la pepsina, una enzima digestiva residente en el estómago. 

- Ejemplo práctico del buen gusto de algunos responsables políticos patrios es la llamada "Rotonda del Jamón", sita en la localidad turolense de Calamocha, dentro de la "Autovía Mudéjar" (entendiendo, en este caso, que sólo pueden circular por ella los musulmanes que residen en nuestro variopinto país).



- En otras partes del planeta existen personas dotadas de ingenio, pero carentes del sentido del ridículo, como, suponemos, aquellos que consideran adecuado el siguiente monumento, erigido en Filipinas como sentido homenaje a los pediatras.



LCasa de Windsor (House of Windsor), anteriormente denominada Casa de Sajonia-Coburgo y Gotha (en inglésHouse of Saxe-Coburg and Gotha, en alemánHaus Sachsen-Coburg und Gotha), es la Casa Real del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte. Fue renombrada el 17 de julio de 1917 por el rey Jorge V del Reino Unido en el transcurso de la Primera Guerra Mundial. Dado el origen germánico del anterior nombre y debido a que entonces el Reino Unido estaba en guerra contra Alemania, decidió adoptar el nombre británico de "Windsor" por una proclamación real.1



FRASE DEL DÍA (sea el que sea)

"Y, al seguirse, huye de sí mismo".- ("Metamorfosis", Ovidio).


CONTRAPORTADA

Fomento de la lectura







martes, 10 de agosto de 2021

chafardero 145

<<EL NUEVO CHAFARDERO INDOMABLE>>

NÚMERO 145   ANNO VII





PRIMERA PLANA 


¿Quién y para qué se determina las normas de convivencia,  el comportamiento centrado, correcto y bien visto por la sociedad ?

Excéntrico, según la RAE,  es aquella persona que se comporta de forma rara o poco común, por lo que llama la atención.

En muchos casos son apartados de la sociedad por sus rarezas o considerados enfermos peligrosos por simple miedo (desconocimiento) a lo diferente (pero todos somos diferentes) y, en ocasiones, encerrados en instituciones psiquiátricas de donde salen de vez en cuando o permanecen el resto de su vida por el bien de todas las personas decentes o consideradas como tal.

Veamos algunos ejemplos:

Gérard de Nerval, gran poeta romántico francés,  pasó media vida en estas instituciones. Solía pasear por las calles de París acompañado de una langosta viva que llevaba atada con una cinta de seda azul. Arruinado y desequilibrado según su psiquiatra, se ahorcó de una verja de la rue de la Vieille Lanterne o calle de la Vieja Linterna. Para entonces, ya había escrito su famoso soneto "El desdichado", en el que se define como: "Soy el tenebroso  -el viudo-, el desolado / príncipe de Aquitania de la tierra abolida / mi única estrella ha muerto, mi laúd  constelado / transporta el negro Sol de la Melancolía".

El fulgurante Rimbaud, tras escandalizar a la sociedad francesa con  poemas  como el famoso "Vocales" y amoríos con Verlaine, poeta simbolista casado y padre de familia, renegó de la literatura y marchó a África, donde vivió comprando y vendiendo esclavos y especias hasta que la enfermedad lo derrotó.

Virginia Woolf, como Pessoa, escribía de pie. Durante un verano creyó que los pájaros cantaban en griego  y que Enrique VIII le gritaba improperios tras unos arbustos.

Isaac Newton, según cuentan, estaba obsesionado con el número tres y jamás estrechó la mano de nadie.

Es famosa la anécdota que representa a Nietzsche hablando con un caballo, pero en su descargo debemos recordar que la sífilis había invadido su portentoso cerebro.

El doctor Conan Doyle, padre del muy racional Sherlock Holmes, creía en las hadas y  los espíritus y estuvo casado con una médium.

El gran escultor austriaco Oskar Kokoschka  esculpió una estatua a tamaño real de su amante Alma Mahler, cuando ella le abandonó, para poder soportar su ausencia.

Lovecratt, H.P. para los amigos, el escritor estadounidense que creó al tenebroso Ctulhu, redactó más de cien mil cartas durante su vida con una media de cincuenta cuartillas cada una. Sin duda alguna sus corresponsales eran personas muy pacientes.

Pierre Loti, alias literario de monsieur Julien Viaud, escritor y oficial de marina francés, rememoró en su vivienda de Rochefort algunos de los escenarios y paisajes que contempló durante sus viajes profesionales,  que incluyen un baño turco, un salón de té argelino  y una pagoda japonesa 

Alfred Jarry, afortunado creador del "tirano absurdo" Ubú Rey y de la patafísica, ciencia "dedicada al estudio de las soluciones imaginarias y las leyes que regulan las excepciones", se paseaba por las calles de París con sendos Colts 45 en el cinto y retaba a carreras ciclistas a los participantes en las primeras ediciones del Tour de Francia.

Por contra, la sociedad acepta en su  seno -llegando a encumbrar a algunos hasta su gobierno- a personas tan centradas como Atila, Gengis Khan, Alejandro, Calígula, Nerón, Heliogábalo, Hitler, Stalin, Franco, el camboyano Pol Pot y sus jemeres rojos, Idi Amin, los presidentes del apartheid sudafricano, la dinastía norcoreana, Pinochet, Ríos Montt, Videla y sus colegas militares, Trujillo, Duvalier, Obiang, Daniel Ortega, los hutus, el presidente usamericano Harry S. Truman que ordenó lanzar las bombas atómicas sobre Japón, etc, etc etc,  sin olvidar a sus imprescindibles colaboradores religiosos, judiciales y militares. Juntos desarrollan la encomiable tarea de mantener sumisa, so pena de cárcel o exterminio, a esa sociedad que los soporta en dictaduras inhumanas y criminales o los vota graciosamente en elecciones más o menos democráticas sin dejar de sufragar todos los caprichos y privilegios a que tienen derecho, por lo visto, por sus cargos y responsabilidades (que nadie les ha pedido que ejerzan).

¿No somos todos algo excéntricos?



¿QUÉ SUCEDIÓ EN ESTOS DÍAS?

- Un contagiado de COVID19 es detenido tras disfrazarse de su esposa para poder volar.

. CitizenGo, plataforma internacional ultraconservadora creada por HazteOír, recoge firmas contra Epi y Blas y los muñecos Lego por "apoyar la agenda radical LGTBI".

- El PP denuncia la declaración de persona non grata a Abascal en Ceuta que salió adelante gracias a la abstención del Pp.

El líder mundial Pablo Casado afirma durante el Congreso de su partido en Baleares que "en las islas no se habla catalán, sino mallorquín, menorquín, ibicenco, formenterés, etc". El Estatut de Baleares reconoce el catalán como la lengua oficial de la Comunidad.



- La Comunidad de Madrid pide al gobierno central que baje el IVA  de la tauromaquia.

- El parlamento gallego bautiza una de sus salas con el nombre del falangista -Antonio Rosón que declaró la guerra la República en Lugo.

- La Agencia de Protección de Datos resuelve con una sanción a Podemos  por "mala colocación de las cámaras de vigilancia" tras la denuncia presentada por un ataque con cóctel Molotov a la sede del partido en Cartagena., pues "las cámaras deben estar orientadas hacia el espacio particular, evitando intimidar a vecinos colindantes , así como controlar zonas de tránsito sin causa justificada".

- TVE repone "Verano Azul"... 

- Condenada una empresa por incluir a un menor de trece años en una lista de morosos.

- Roba joyas y dinero de las colectas de varias iglesias valencianas trepando por sus fachadas.

El presidente usamericano Biden borra un tuit con un mapa de Marruecos en el que no aparece el Sáhara.








OLDIES

Le bautizaron como Richard Wayne Penniman en Georgia, hijo de un destilador ilegal de whisky, lo que no le impedía ser un ferviente adventista del Séptimo Día (¿a partir de cuál?). Cuenta la leyenda urbana que le expulsaron  del seminario donde estudiaba para ordenarse por escandalizar con sus ritmos provocadores en el ógano Hammond del templo. Considerado "La reina del rock'n'roll" (las malas lenguas opinaban que prefería los pantalones a las faldas), Little Richard es famoso por sus espléndidas cazadoras llenas de pedrería y por haber compuesto clásicos como:

Tutti Frutti (cuya letra dice, entre otras sugerencias: "Tutti frutti , buen culito / si no entra, no lo fuerces / puedes engrasarlo para facilitarlo", y hasta ahí traducimos por si hay ropa tendida); https://www.youtube.com/watch?v=ZSx91WBQLpg

Long Tall Sally https://www.youtube.com/watch?v=jqxNSvFMkag

"Womp-bomp-a-loom-op-a-womp-bam-boom!

¿Queda claro?




LITERALIA


LA MUJER DEL BLUESMAN



Tenía trece años la primera vez que vi a mi musa… y el encuentro sacudió mi adolescencia como un mazo sacude del golpe el bronce de una campana y lo hace vibrar. Pero yo vibraba a ritmo de blues.


Para ser sinceros, tenía trece desde hacía ya algunos años, porque si hubiera contado mi auténtica edad me habrían hecho pagar entrada completa en aquel antro de blues que se hacía llamar “salón de baile”. Y no había otro sitio en el insignificante pueblucho de la América profunda donde vivía, Twist, Arkansas, en donde uno pudiera escuchar a los verdaderos bluesmen. Los que cantaban y tocaban en los famosos locales de la Calle Beale de Memphis, a unos 40 kilómetros de mi irrelevante villorrio. A veces teníamos la suerte de que viniera un Elmore James, un T-Bone Walker o un Muddy Waters, pero lo más frecuente era que actuaran músicos todavía no muy conocidos, como el inmenso Howlin' Wolf o la estrella de aquella noche, Riley de la calle Beale. Y nadie tocaba mejor la guitarra de blues que Riley, ni estiraba como él las notas de sus cuerdas hasta lo místico y sobrenatural. Ni lo habría jamás, por supuesto. Ignoraba qué tipo exacto de bazofia musical oirían los blancos en sus locales, pero con seguridad no sería nada comparable. Porque, por supuesto, el tugurio-salón de baile de Twist era un local de negros. En el año 1949 nadie nos habría llamado afroamericanos, y de haberlo hecho alguien le habrían aplicado la justicia blanca para negros de forma fulminante, sin dejar de reírse a carcajadas en ningún momento, claro está.


La actuación de Riley ya había terminado y ahora estaban en el escenario grupos locales, ambientando el oscuro maremagnum de brazos y piernas danzantes que llenaba la pista. Yo entretanto me había perdido por el piso superior, donde estaban los camerinos de los artistas. En parte por mitomanía (quería ver el camerino de Riley) y en parte por seguridad. Igual les sorprendería saber lo salvajes que podían ser alguno de los patanes grasientos del lugar cuando se encontraban frente a una muchachita negra, supuestamente menor y supuestamente inocente, cuando es evidente que está sola y ha venido sin acompañamiento de familia o amigos.


Encontré sin demasiado esfuerzo el camerino que buscaba. Parecía vacío… y tenía la puerta entreabierta… como invitando a hacer lo que yo naturalmente hice, abrirla de par en par. Y entonces la vi.


Nunca antes ni después en mi ya larga vida se ha visto mi sensibilidad tan conmocionada. Si me hubiera encontrado a la Reina de Saba con su séquito de abanicadores y acompañada de leopardos domesticados mi sorpresa habría sido menor. Allí estaba, yacente sobre un sofá, desnuda, magníficamente hermosa e inerte, rodeada de botellas de alcohol en algunos casos con restos de alcohol... Criatura sublime… Venus de obsidiana. ¡Cuánta belleza! ¡Qué perfección de formas! ¡Qué voluptuosas curvas! ¡Qué maravilla de piel oscura y refulgente! ¡Qué suerte tenía el cabronazo de Riley por disfrutar aquel regalo de los dioses!


Sí ya sé que posiblemente mis gustos no sean del todo convencionales. A otras chicas de mi edad les gustan los chulillos fanfarrones y alborotadores, sin excluir las que sienten debilidad justamente por los patanes grasientos. A mí en cambio me gustan… otras cosas. El blues, por ejemplo. El blues y la belleza.


No sé cuánto tiempo estuve en éxtasis contemplando el sueño de la sensualidad hecha materia tangible. Posiblemente mucho. Pero sí que reaccioné cuando empecé a sentir calor. No el lógico calor interno provocado por la situación, sino otro claramente externo. Y abundante, lo que no dejaba de ser extraño porque estábamos en diciembre.


Cuando volví la vista de nuevo al pasillo por el que había entrado comprendí la situación. En la escalera que comunicaba con la pista de baile había humo y fuego, que venían desde abajo. El local ardía.


Conocía aquel tugurio, y conocía un acceso por donde podía bajar hasta la cocina, desde donde probablemente se podría escapar. Pero no podía dejar allí a mi musa, a Cleopatra silenciosa y durmiente, y menos con tanto alcohol. Afortunadamente soy una mujer fuerte, así que cargué con ella sobre mis brazos (sí, la toqué, pero eso no lo puedo contar) y abandoné el camerino mientras el incendio empezaba a adueñarse de él.


Conseguí llegar con mi preciosa carga hasta la cocina, pero la salida estaba bloqueada por unas vigas que se habían desplomado desde el techo. No tenía otra opción que intentar salir por la puerta principal, esquivando como pudiera las llamas y protegiendo si fuera menester con mi menudo cuerpo el inconsciente esplendor que llevaba a cuestas.


Fue cuando trataba de escapar de la pista de baile entre llamaradas que volví a encontrar a alguno de los patanes grasientos de quienes anteriormente me escondiera. Estaban peleándose por los suelos como cafres, vaya vd. a saber por qué tontería y, peor aún, esparciendo el fuego. El salón de baile estaba caldeado por barriles con queroseno ardiendo (sí, eran así de brutos), y el par de zotes lo habían estado volcando por toda la pista en su violento afán de demostrar que eran más bestias que su adversario.


Creo que ni me vieron entre el humo y la refriega, y desde luego yo nada hice por llamar su atención, ¡y menos llevando en brazos a mi hermosura silente mas no insensible! Me había alejado ya lo suficiente de ellos y estaba a punto de lograr escapar cuando divisé otra figura entre las llamas. Se estaba asfixiando, y estaba ya pidiendo ayuda entre toses desde el suelo, incapaz de levantarse. Probablemente estaba perdido y no sabía por dónde huir. Me acerqué a él.


No es frecuente que la bondad se vea recompensada en este mundo, y menos de forma inmediata. Pero a veces ocurre. A mí me ocurrió, aunque sólo de forma inmediata. ¿Saben quién era aquel infeliz? ¡Riley! ¡El bluesman! ¡El de las notas alargadas y místicas! ¡El que nos había hecho palpitar hacía un rato con su “Three o’clock blues”! En fin, que tuve que sacar a uno con cada mano. No era cuestión de permitir la muerte de ninguno de los dos. Cuando Riley se recuperó me agradeció educadamente el haberles salvado a los dos, y me preguntó mi nombre. Yo pensé “y ahora es cuando me va a dar pases para su próximo concierto, o me va a ofrecer algún trabajillo acompañando a la banda, o me lo va a gratificar en metálico (menos probable), o...”. Pero, ¿gratificación?, ¿reconocimiento? Ni por asomo. Al final se portó como un cabrón. Ni pases, ni trabajillo ni nada. Únicamente me preguntó mi nombre, y se lo dije, con lo que realmente yo le di a él más de lo que él me dio a mí.


Volví a ver muchas veces más a Riley, aunque ya sólo en el escenario. También a su belleza de ébano, pero se fue haciendo cada vez más difícil a medida que se iba haciendo famoso. Al poco ya no era Riley King, sino Beale Street Blues Boy King, pero era muy largo para nombre artístico, así que se convirtió en Blues Boy King, y finalmente en B.B. King.


Pese a lo ingratamente que se portó conmigo (jamás mencionó, por ejemplo, la nimiedad de que le salvé la vida) nunca dejé de ser una rendida amante de su blues. Le vi sudar, gemir y conmocionarse en sus conciertos infinidad de veces. No sé si me hubiera gustado que me reconociera; realmente no sé qué me habría gustado de él aparte de su embriagadora música. ¿Ser la mujer del bluesman? ¿Y podría yo competir con la belleza de ébano, con las sucesivas bellezas de ébano que le acompañaron a lo largo de su vida? Probablemente no.


Pero al menos me cabe la satisfacción de que ellas, todas sus bellezas de ébano, llevan algo mío. Llevan mi nombre. Porque desde el día del incendio de Twist todas las guitarras Gibson de B. B. King se han llamado Lucille. Y Lucille soy yo. Algo es algo.

(Texto de Enrique Gª Segovia)



CRÓNICAS DE SOCIEDAD (urbi et orbi)


- Considerado el Stonehenge español, yace habitualmente bajo las aguas del embalse de Valdecañas (Extremadura) desde 1963 como otro ejemplo más entre el país respetuoso con su cultura y otro ignorante y salvaje como ... El dolmen de Gualdalperal está datado entre el III y el II milenio a.C. Era una tumba de "corredor". estaba formado por una cámara ovoide de 13 metros de diámetro  cerrada con 13 piedras con un pasillo de acceso -o corredor- de 2'1 metros de largo y 1'4 m de ancho. La entrada de la cámara está indicada por un menhir de dos metros de altura con serpientes grabadas. representación del curso del Tajo. En total, se considera que el conjunto llegó a tener 150 piedras de granito colocadas verticalmente. Ahora se estudia declararlo Bien de Interés Cultural, aunque no existe ningún proyecto de traslado a otro lugar... más seco.



- Anuncio  en "El Heraldo de Castellón" .durante el período en que el gobierno republicano se instaló en Valencia (aunque es una simple coincidencia que nos sirve para datar el reclamo).



Es una estatua de  bronce de Jesús Cristo sumergida a 25 metros de profundidad en la bahía de San Fruttuoso  (Liguria), cerca de Portofino, en 1954; en el mismo lugar donde pereció ahogado el buzo Darío Gonzatti. Conocido como "El Cristo del Abismo", mide 2'5 metros de altura. Existen otras estatuas similares en otros países del mundo. 




FRASE DEL DÍA (sea el que sea)

"Están seguros. Son correctos sin llegar jamás a ser amables, y son inteligentes y cultos, aunque no tienen verdadero interés por nada. En eso se convierten los seres humanos , cuando cambian la vida por la mera existencia y renuncian a la ambición en aras de la seguridad".- ("La hermana pequeña", Raymond Chandler).


CONTRAPORTADA




Enrique Gª Segovia, 1958-2021