<<EL NUEVO CHAFARDERO INDOMABLE>>
NÚMERO 98.- ANNO VI
PRIMERA PLANA
Vivimos a la intemperie, construyendo castillos en el aire para hacerla más habitable.
Llevamos una existencia más o menos organizada: familia, trabajo amigos, propiedades, ocio... Nos consideramos cultos y civilizados, inteligentes, hábiles. Creemos que todo está atado y bien atado en nuestras vidas, que nuestros actos y decisiones son justos y apropiadas al momento, que no alteran nada ni a nadie, acomodados en nuestro propio pedestal.
Es cierto que la existencia diaria nos procura sinsabores, fracasos y frustraciones; pero nos adaptamos a ellas como los supervivientes natos que somos. Sin embargo, lo único cierto es que desconocemos cuanto nos rodea. Si todo estuviera atado y bien atado, ¿existirían imprevistos fatales como fugas radiactivas, terremotos y maremotos, erupciones volcánicas, pandemias asesinas que destruyen el maravilloso cuento de hadas que creemos vivir?
Como dijo un autor francés del siglo XIX, "el único sentido es el sinsentido", es decir, sólo existe nuestra incapacidad intrínseca para desentrañar el auténtico sentido de la realidad que nos rodea; de lo contrario evitaríamos -y nos adelantaríamos- a las catástrofes citadas. Esa es la razón de que vivamos a la intemperie, expuestos a los numerosos peligros que nos acechan, felices, idiotizados por nuestro ficticio bienestar, convencidos de que la existencia es una película rosa en la que siempre nos llevamos a la chica y nuestros planes terminan bien. Por desgracia, los deseos no son reales; sólo son anhelos, sueños, y, como dijo Calderón de la Barca, "los sueños sueños son", y el Buda enseñó que lo primero que debemos desterrar de nuestra vida es Maya, la ilusión.
Estos días vivimos asustados, escondidos, algunos sacando imágenes religiosas o rezando al Ser Supremo en que dicen creer, inventado también por nosotros, para que los libre de todo mal y sigan vivos en el maravilloso mundo que habitamos; pero ¿por qué existen el mal, el dolor, la muerte? ¿Quién los necesita? Si existiese ese Ser Supremo, sea cual sea su nombre, estando hechos a su imagen y semejanza y siendo hijos suyos, ¿por qué permite tanto sufrimiento, tanta crueldad, tanta estupidez? La lógica -o lo que denominamos así- dice que tal Ser Supremo no existe. La fe, otro invento humano, afirma que los designios divinos son incomprensibles para nuestra limitada inteligencia, aún estando hechos a su imagen y semejanza. Entonces, ¿se regodea con nuestros padecimientos? Pero, ¿no hemos quedado en que era misericordioso? Otro invento para soportar la intemperie.
En resumidas cuentas, los días que vivimos -y viviremos- temerosos de contagiarnos del asesino silencioso que bautizamos coronavirus nos enfrentan a esa realidad que no terminamos de comprender -y, por tanto, superar-, a nuestra vulnerabilidad fundamental, a nuestra constante existencia a la intemperie, sin encontrar ninguna respuesta que nos consuele.
¿QUÉ SUCEDIÓ EN ESTOS DÍAS?
- El líder popular Pablo Casado culpa el 8-M de la epidemia de coronavirus.
- Según algunos franquistas, "la epidemia del coronavirus es la venganza por sacar a Franco de el Valle de los Caídos".
- Aumentan las adopciones de perros con la excusa de salir a la calle para pasearlos.
- Decenas de jóvenes marchan de la mano en Tánger al son de consignas religiosas contra el coronavirus.
- Multado un hombre de 77 años por salir del confinamiento para "cazar Pokemons".
LITERALIA
CAPÍTULO
XXVII
Adalberto
Rabazas era un hombre aturdido (1).
NOTAS:
- Su sorpresa fue mayúscula, cuando se presentó la inspectora Ballesteros en su despacho embutida en un mono negro con cremallera central que resaltaba sus curvas y provocó las miradas admirativas de todos los presentes, incluido el director de la sucursal, don Restituto, padre católico de seis hijos. Nadie sospechó que fuese policía.
Se acomodó frente a Adalberto y le dijo:
- Tenemos que hablar.
- La escucho.
- Aquí no.
- ¿Ahora o... en otro momento?
- Tengo un coche esperando en la calle.
- ¿Estoy detenido?
- No, sólo es una charla entre dos viejos amigos.
Minutos
después, estaban sentados en la parte trasera de un vehículo negro
con cristales tintados; lo que impedía ver a Adalberto el trayecto
que realizaban, además de la capucha negra que cubría su cabeza.
Según la inspectora Ballesteros era una cuestión de seguridad.
Cuando
le quitaron el capuchón, Adalberto se encontró esposado y sentado
en una rústica silla de madera en una habitación de dimensiones
desconocidas, pues la única luz era una bombilla baja que lo
deslumbraba e impedía ver las paredes del cuarto. Tampoco podía ver
a la inspectora y a sus posibles acompañantes. Sintió que
regresaban sus peores pesadillas.
- Como ya ha podido sospechar, estamos en un piso franco
(2)- afirmó la inspectora.
- ¿Qué quiere de mi? Antes me dijo que no estaba
detenido.
- Un poco de información, señor Rabazas.
- Pago todos los años religiosamente a Hacienda.
- ¡No se haga el gracioso! - bramó la inspectora.
Adalberto
tragó saliva. En ese momento, recordó todo lo que Adriana le había
contado sobre ella.
(2)
Casa de seguridad, lugar secreto para proteger testigos o personas
amenazadas.
- Quiero saber el actual paradero de su amiguita Adriana
Montenegro.
- Lo ignoro. Todo lo que sé es que ha salido del país.
- ¿Pretende hacerme creer que no se lo ha comunicado
para que se reúna con ella?
- Sí – respondió un lacónico Adalberto Rabazas.
- ¡Miente! -gritó la inspectora-. La protege, porque
la ama.... ¡Voy a empapelarlo, Rabazas!
- Le digo la verdad.
- ¡Vaya un apellido ridículo el suyo!... Un poco más y
se llama bragazas (3)
Varias
carcajadas resonaron a continuación.
3)
Hombre de carácter débil, muy condescendiente y manipulable por
otra persona, en especial su mujer.
-
En vista de que no quiere colaborar, lo dejaré un rato con mis
compañeros para que le refresquen la memoria.
- ¿Esto
es lo que usted entiende por una charla entre amigos? - inquirió un
azorado Adalberto Rabazas.
De
la oscuridad salieron dos hombres en mangas de camisa que Adalberto
reconoció como los dos falsos operarios de mudanzas que lo
interrogaron en la nave industrial. Sin dirigirle la palabra, uno de
ellos le propinó un puñetazo en la cara.
- ¿Dónde está tu amiguita? - preguntó el otro.
- Todo lo que sé es que pidió el traslado a otra
embajada y salió del país con “El Mosquito” - respondió
Adalberto.
- ¿A qué país? -insistió el policía, mientras le
atizaba otro mamporro-. ¿Tenemos extradición?
- ¡Y yo qué sé! - exclamó un Adalberto enfurecido.
- Los gritos no están permitidos, listillo – afirmó
el primer policía, mientras le asestaba otro guantazo.
Reapareció la inspectora Ballesteros y ordenó
a los hombres que se retirasen.
- Sólo queremos información. De su colaboración
depende nuestro comportamiento.
- Es todo lo que sé – insistió Adalberto.
- ¿Pretende decirme que ella no le pidió que se
reuniese con ella en su nuevo destino después de revolcarse en la
cama tantas veces?
- ¡Exacto! No me lo dijo para que no la siguiera.
Suponía que usted podía interrogarme para descubrir su paradero.
- Parece que me conoce muy bien. ¿Y qué más le dijo?
- Que era inocente y que usted estaba obsesionada con
ella.
- ¿Algo más?
-. Que... nada más.
-Tú y yo podríamos pasarlo muy bien -afirmó la
inspectora, cambiando de táctica-. Muchos y muchas han intentado
conseguir lo que tú podrías obtener gratis – añadió, mientras
se bajaba la cremallera del mono hasta el nacimiento de sus
generosos senos.
- No tengo más que añadir.
- ¡Bien, señor Rabazas! -dijo la policía con un tono
más serio, mientras se subía la cremallera-. Su lealtad es
encomiable. Además tiene razón: no puede decirme más.
- ¿Ha estado provocándome para hacerme hablar?
- Sí. Su amiguita es muy lista y ha elegido un país sin
extradición para que no podamos reclamarla - añadió la
inspectora. Después, ordenó a los dos agentes que le quitasen las
esposas.
- Mis compañeros han sido demasiado rudos por momentos,
pero necesitaba confirmar que usted no sabía nada.
- ¡Muy amable por su parte! - afirmó Adalberto Rabazas
con ironía.
- Antes de irse, le contaré algo: he visto las imágenes
que grabaron las cámaras de infrarrojos instaladas en la sala donde
exponían el Gran Diamante Rosa y resulta que su amiguita y “El
Mosquito” estaban allí preparados para robar la piedra; pero
alguien se los adelantó. ¿Qué le parece?
- No la creo. Adriana no me mentiría.
- Es usted un ingenuo.
- Nos queremos.
- ¡Largo de aquí!...Suba por la escalera que hay detrás
de usted, y encontrará una puerta al final. Ábrala y accederá a
una tienda de ordenadores por la que llegará a la Puerta del Sol.
- ¿Dónde estamos?
- En la cripta de la antigua iglesia del Buen Suceso (4).
- Pues no ha sido muy bueno que digamos.
- Espero que sea la última que nos veamos – añadió
la inspectora Ballesteros antes de desaparecer en las sombras.
Adalberto
Rabazas se incorporó y avanzó a tientas hasta chocar con algo
sólido. Tanteó a derecha e izquierda hasta que descubrió una
estructura que le recordó una barandilla. Había tropezado con el
primer peldaño de la escalera. Tal y como había dicho la
inspectora, apareció en la tienda Apple que ocupa los bajos del
antiguo Gran Hotel París (5); en cuya azotea estuvo instalado desde
1935 el anuncio del jerez “Tío Pepe” hasta su traslado en 2014
a otro inmueble de la plaza..
Adalberto
Rabazas se sentía humillado y furioso. Atravesó sin rumbo fijo
la Puerta del Sol entre el bullicio de la gente y el estruendo del
tráfago. ¡Cuánto extrañaba a Adriana! ¡Cuánto le gustaría
abrazarla, contarla todos los sufrimientos que había padecido y
rogarla un poco de cariño! Pero... estaba muy lejos, ajena a las
desgracias que acarreaba a quienes la conocían y trataban. De
repente...., vio a una mujer con una gabardina y gafas de sol, y
apresuró el paso hasta alcanzarla. Cuando lo consiguió, puso su
mano sobre su hombro, y dijo:
- Querida Adriana, ¡cuánto te extraño!
La
mujer se volvió hacia él, pero resultó ser una desconocida que lo
miraba con asombro y rabia. Adalberto se disculpó, mientras
aseguraba haberla confundido con otra persona.
Prosiguió
andando sin rumbo, indiferente a cuanto lo rodeaba. Maripi Civantos
de la Esparraguera asistía a un desfile de modelos en un céntrico
hotel de la ciudad. Joselillo Gandarias tenía turno de tarde, Quique
recorría el país con una orquesta... Siempre estamos solos en los
momentos más importantes de nuestra vida. Se refugió en su
domicilio, se duchó concienzudamente, y, luego, se sirvió un
whisky doble que bebió de un trago. Estaba muy cansado, muy
desanimado. Puso en el tocadiscos un elepé adecuado: los “Himnos
del Silencio” de su admirado Van Morrison. No se permitió llorar,
pero se hundió hasta lo más profundo de la frustración.
4)
La iglesia de Nuestra Señora del Buen Suceso se ubicaba en la
parte oriental de la Puerta del Sol, entre las calles de Alcalá y
Carrera de San Jerónimo. Surgió en 1483 como remodelación del
Hospital Real de la Corte y permaneció en pie hasta 1854 en que fue
demolida para modernizar la plaza. Su reloj fue trasladado al
edificio de gobernación (actual sede de la Comunidad) hasta que fue
sustituido por el actual, cuya famosa bola baja todas las Nocheviejas
para anunciar el Año Nuevo. Más tarde, se construyó un nuevo
templo en la calle de la Princesa frente al Corte Inglés de
Argüelles.
5) También denominado “Fonda París”, existió
desde 1864 hasta 2006. Algunos huéspedes ilustres fueron el pintor
Manet, el músico Maurice Ravel, el poeta y diplomático Rubén
Darío, o León Trotsky tras su expulsión de Francia. En sus bajos,
se abrió uno de los principales cafés-tertulia de la ciudad: El
Café Imperial o de la Montaña (6) .
6) En él perdió un brazo Valle Inclán tras una
disputa con el periodista Manuel Bueno. También frecuentaron el
local el escritor bohemio Alejandro Sawa (1862-1904) -al que se
considera inspiración del Max Estrella de “Luces de Bohemia”
del citado Valle-, quien mostraba a todos los parroquianos el lugar
exacto de su frente donde lo había besado el gran Víctor Hugo
durante su estancia en París, el poeta simbolista Paul Verlaine
(7) o el famoso torero Frascuelo, nacido y muerto como Salvador
Sánchez Povedano. Debido a sus dieciséis puertas, popularmente era
conocido como el “Café Pulmonía”.
7) Paul Verlaine vivió entre 1844 y 1896, hijo de
militar, escribió grandes poemarios como los “Poemas
Saturnianos”, las “Fiestas Galantes”, u “Hogaño y antaño
(Jadis et naguère)”. Sin embargo, es más conocido por sus
escandalosos amoríos -estando casado- con el fulgurante Rimbaud y
su fuga con él primero a Londres y luego a Bruselas; donde disparó
contra su amante, lo que le acarreó dos años de prisión, el
divorcio de su esposa y el escarnio público. Desde entonces, y
hasta su fallecimiento, llevó una vida errante y miserable,
muriendo envejecido y arruinado. Gran bebedor de absenta, (8) -como
todos los simbolistas-, una leyenda negra cuenta que estrelló a uno
de sus hijos contra la pared en pleno rapto alcohólico. Paradigma
del poeta maldito.
8) También llamada ajenjo y Hada Verde -por su color-
y Diablo Verde -por sus efectos-, se compone de artemisa, hinojo y
anís -la santa trinidad-, a las que pueden añadirse otras hierbas
como melisa, cilantro, angélica o cálamo. Tras macerar las plantas
y destilar el líquido resultante en un alambique, se reduce con
agua. Puede alcanzar los 90º de alcohol.
Adalbeto
Rabazas terminó el día con varias copas de absenta hasta que la
rabia devino en sueño.
OLDIES
Anita O'Day (Anita Belle Cotton) fue una cantante de jazz menos conocida, pero no inferior, a las grandes damas Billie Holiday, Sarah Vaughan o Ella Fitgerald. Como siempre, les ofrecemos algunos de sus clásicos.
Tea for two: https://www.youtube.com/watch?v=xKqFe-nYU7A
Fly me to the moon: https://www.youtube.com/watch?v=v-mg9pGqo6Q
Beautiful Love: https://www.youtube.com/watch?v=VjLYoTR8cDE
Anita O'Day (Anita Belle Cotton) fue una cantante de jazz menos conocida, pero no inferior, a las grandes damas Billie Holiday, Sarah Vaughan o Ella Fitgerald. Como siempre, les ofrecemos algunos de sus clásicos.
Tea for two: https://www.youtube.com/watch?v=xKqFe-nYU7A
Fly me to the moon: https://www.youtube.com/watch?v=v-mg9pGqo6Q
Beautiful Love: https://www.youtube.com/watch?v=VjLYoTR8cDE
CRÓNICAS DE SOCIEDAD (urbi et orbi)
- El shinrin-yoku (baño de bosque) es una disciplina japonesa avalada por la Sociedad de Terapia Forestal de Japón, consistente en pasear y recorrer los bosques urbanos como una curación y bálsamo para la mente, el cuerpo y el alma. En alguna medida (que desconocemos) se parece al friluftsliu noruego o vida libre y al waldeinsamkeit alemán, relacionado con "la sensación de soledad que se siente al recorrer un bosque".
- Anna Smith Strong (1749-1812), nativa de Nueva York, fue una ama de casa y madre de diez hijos perteneciente al Culper Spy String o Anillo de Espías Culper, una red de agentes civiles voluntarios que informaban a George Washington. Según otros autores, no formaba parte de dicho grupo. Comunicaba los movimientos de la flota sudista, colgando de una manera determinada la ropa de su colada en su casa de Long Island.
- Patience Lovell Wright (1725-1786) fue la primera escultura usamericana reconocida como tal. Nacida en la Bahía de las Ostras u Oyster Bay, Estado de Nueva York, en una familia cuáquera vegetariana. Tras casarse, se trasladó a Philadelphia, donde entretenía a sus hijos modelando figuras y rostros humanos con cera y masa de pan. A la muerte de su marido, transformó su pasatiempo en profesión, realizando figuras de tamaño real y bustos que vestía con ropas reales y añadía ojos de cristal que tuvieron gran éxito entre el público que pagaba gustoso por verlas. Por ese motivo, se trasladó a Londres; donde modeló figuras de la realeza y numerosos nobles. Durante la Guerra de Independencia Usamericana, dada su amistad con Benjamín Franklin, se dedicó a esconder mensajes cifrados en las velas que fabricaba. Falleció en la citada Londres tras sufrir un accidente doméstico.
- Louise Renée de Penancoët de Kérouaille (1649-1734), duchesse de Portsmouth entre otros títulos, fue amante del rey inglés Carlos II, del que tuvo un hijo llamado Carlos Lenox. Instalada en tierras británicas como dama de compañía de la duquesa Enriqueta Ana Estuardo; a cuya muerte se convirtió en dama de compañía de la reina Catalian de Braganza. Aprovechó su estancia en aquellas tierras para espiar en favor de Luis XIV, el magnífico "Rey Sol", quien la nombró duchesse D'Aubigny y le regaló el castillo de la Verrerie en el valle del Loira. Su apellido, también escrito Querouaille, se transformó en Carwell o Carewell al pasar a Inglaterra. En su larga progenie podemos destacar a la malhadada Lady Di y su viudo Charles.
- Leona Vicario (1789-1842, México) fue una patriota mexicana durante la guerra de independencia que su país mantuvo con España que informó a los insurgentes de los movimientos militares españoles en la Ciudad de México como integrante de la sociedad secreta "Los Guadalupes". También fue una de las primeras periodistas de su país, quien, en agradecimiento por su comportamiento durante dicho conflicto con la metrópoli, la nombró "Benemérita y Dulcísima Madre de la Patria". También es la única mujer que ha recibido funerales de Estado.
- La madrileña Calle de Carretas toma su nombre de las barricadas con carretas que levantaron los madrileños contra las tropas del rey Carlos I durante la Guerra de las Comunidades o de los Comuneros.
Capiteles de la iglesia de San Pedro el Viejo de Huesca. En el de la izquierda se observa un personaje con la mano siniestra en el oído, en el que algunos han querido ver a un individuo hablando por el móvil.
- Párrafo del libro "Malasaña" de Carlos Osorio: "El actual barrio de Malasaña ocupa el espacio de la Dehesa de Amaniel, un encinar salpicado de tierras de cultivo. También era coto real de caza que se destinó luego a usos ganaderos. Además de fincas de nobles y de la Iglesia, había huertos particulares, siendo frecuentes los campos de trigo y cebada. Las continuas lluvias torrenciales del siglo XIV arrasaron los cultivos y provocaron una gran hambruna que remató la peste".
- Fotografía del Viaducto en 1880.
FRASE DEL DÍA (sea el que sea)
Adán era de color negro. Eva era de color blanco. De la unión de ambos nació una humanidad gris.- (Enrique Jardiel Poncela).
No hay comentarios:
Publicar un comentario